La elección de un buen vidrio es fundamental para aumentar las prestaciones de la ventana.
Nos debemos plantear cuáles son las necesidades que queremos cubrir a la hora de cambiar nuestras ventanas. Para ello, debemos considerar no solo las características estéticas, sino también la orientación de la vivienda, el aislamiento térmico que requiere, reducir el ruido que proviene del exterior, maximizar la seguridad, mayor entrada de luz o intimidad y garantizar eficiencia energética con la que puedes lograr ahorrar hasta un 60% de calefacción en invierno y en aire acondicionado en verano.
Tanto como si tu elección es un vidrio transparente o mate, laminar de seguridad o con doble/triple acristalamiento, con aislamiento al frío/calor o acústico, te asesoraremos en todo el proceso, para asegurarte que las ventanas se ajustan a tus necesidades.
También llamado vidrio simple
o común. Es un vidrio base que
puede ser sometido a distintos
tipos de transformación, como la
colocación capa de baja emisividad,
control solar o laminar de
seguridad, o templados.
En acabado (transparente o mate).
Compuesto por dos piezas de vidrio simple, unidas con una lámina intermedia de polivinil butiral (PVB), de mayor resistencia y protección ante impactos. En caso de roturas, esta lamina asegura que los fragmentos del vidrio permanecerán adheridos. Para aumentar sus prestaciones, se pueden aplicar capas de baja emisividad, control solar o acústico.
Si a un doble acristalamiento le añadimos un perfil metálico o de plástico rígido (cámara) y un vidrio adicional, unidos y sellados conseguimos un triple acristalamiento, aumentando las prestaciones del conjunto de la ventana. Para aumentar sus prestaciones, se pueden aplicar laminares de seguridad, capas de baja emisividad, control solar o acústico. Puede ser fabricados con vidrios simples o con laminares de seguridad.
acertado para aislarse
térmicamente en invierno
o bien, en viviendas ubicadas
en zonas con climas fríos una
gran parte del año.
¡Ayudará a reducir
la factura de calefacción!
idóneo para protegernos tanto
del frío en invierno, como del
calor en verano… ¡todo el año!
y aire acondicionado.
aumentará confort acústico
considerablemente dentro de
la vivienda, ya que atenúa el ruido
de la calle y el producido por los
factores climatológicos, como la
lluvia, el granizo o las tormentas.
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